Tengo colgado aun cerca de un centenar de opiniones recibidas a propósito de los artículos “¡Fuera el reguetón (y otras seudomúsicas afines) de las escuelas!” de Fidel Díaz unido a “Perrea, niña, perrea” de Julio Martínez Molina que habíamos publicado en la revista El Caimán Barbudo. Por vías diversas, me siguen llegando mensajes, especialmente a partir de que Silvio Rodríguez lo colgó o linkeó en su blog Segunda cita. De allí vengo extrayendo muchos de ellos, pues me parece oportuno y gratificante que pensemos en todos estos temas que invaden este mundo, al igual que las armas. De alguna manera esta invasión espiritual de la seudocultura consumista es cómplice de las guerras, pues se trata de la globalización de una filosofía egoísta, del clásico “lavado de cerebro” que le achacaban al comunismo en la guerra fría (en la primera guerra fría, pues vivimos en la segunda y, por tanto, vuelve el término a estar de moda); claro que yo me refiero al “lavado capitalista” que es más profundo y viene en papel celofán. Ese nos enseña “el Tener para Ser”, el “pisar al prójimo para tener”, “la feria de ilusiones en sustitución del mundo real”, los sueños y conflictos personales, simplificados, y magnificados hasta caricaturizarlos, para extinguir los sentimientos profundos y sociales”, “juega, compra, tu vida es divertirte con sensaciones primarias, epidérmicas, violencia, sexo (desespiritualizado), vértigo; nada de poetizar, hurgar, crear “ya todo está inventado”; o sea, piensa en ti y olvídate del mundo que eso no tiene remedio, él se mueve por sí mismo, automáticamente.“No te preocupes por los genocidios cotidianos, míralos con ojos de vidrio, como efectos especiales de otra película más, vive tu Hollywood”.
Hace tanto como 20 años, (pues esto que ahora salta a la vista del descerebramiento que propaga la seudocultura masiva, es un proceso que tiene casi un siglo) hice un blusillo relacionado con esto que nunca tuvo título, acaso “Spot comercial”, “Homo no sapiens”, o sencillamente “Oda a los peces”con el texto de la canción doy paso a otra ronda de mensajes.
Las calles de este tiempo van a dar a una pecera:
las manos ya no palpan, las miradas son de cera,
la gente va adaptándose a nadar
y hace maromas por entrar a las vidrieras.
El nuevo dios: un maniquí dentro de un reino de Babel
donde el idioma universal es de papel,
los peces se retractan de la mar
van a la iglesia a des-orar
y en el altar dejan la piel.
No hay que reir,
no hay que llorar,
no hay que decir
ni que escuchar,
ni maldecir,
ni que adorar,
ni descubrir, ni que inventar:
¡La vida viene hecha en una caja de cristal!
Yamirisss y Lien, sobre el reguetón y los niños: esos bailes no son inocentes para nadie, son una representación explícita de un acto -que no tiene por qué ser malvado- pero pertenece a la vida íntima y me parece que no debe tomarse a la ligera. Si a una persona adulta le complace el perreo, felicidades, que lo disfrute, está ejerciendo su libre albedrío de mostrar abiertamente sus dotes y habilidades ¨sensuales¨. Pero me parece muy desfasado ver a un niño o a una niña ensayando esa actividad. Más grave aún, es la idea que se está formando vívidamente ese niño sobre las mujeres, esa niña de sí misma y ambos sobre cómo establecer las relaciones. Es todo un reto prepararlos para que puedan ser felices y plenos de adultos.
27 de septiembre de 2014, 4:04
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Carmina dijo...
Hay música buena y música mala de todos los géneros y subgéneros. En principio, ningún género es, en si despreciable, sino ciertos productos.
Pero: si entre las características del reguetón está el machismo, la cosificación se la mujer y otros desvalores sociales, como la grosería o la violencia, entonces ya hablamos de otra cosa.
patricia c., estoy de acuerdo contigo porque, en lo que tiene de banalización del sexo, tampoco el reguetón me parece interesante. No me parece interesante proponerlo como modelo o apoyarlo y sugerirlo implícitamente, al darle un sitio en tu vida, en la escuela, en fiestas, parques, etc. o en la tele.
La música configura, como todo lo demás: desde el levantamiento de peso hasta el ajedrez, pasando por el juego de casino. Conllevan un marco de pensamiento. Su práctica transforma (modifica) el cuerpo y la mente.
No pondría a un niño o niña, en formación, a practicar algunas de estas actividades, como levantar pesos o jugar a la ruleta, porque no es bueno para él o ella (mis hijas son ahora mujercitas, entonces eran niñas). Tampoco creo que el reguetón sea bueno y se lo "censuraría", por la misma razón por la que creo que, en un ámbito educativo, como es la escuela, estas actividades deberían estar censuradas, y seguramente también en otros ámbitos públicos entre cuyas misiones esté la formación.
La publicidad del tabaco y las bebidas alcohólicas está censurada, la de la prostitución creo que aún existe pero está muy regulada. ¿Por qué nos asustamos tanto de las palabras a veces?
Y en cuanto a la moda y el mercado, mi ideal para mis hijas no es hacerlas buenos objetos de mercado. Más bien me gustaría poder protegerlas de él. Esto no es posible ni sano, ni en el caso del mercado ni en ningún otro. Entonces, tratar de que ellas se hagan sus propias armaduras.
Lola, te envío un beso derechito a Aragón. Me encantan tus comentarios sabios y ecuánimes y tus músicas cuando las propones.
Felicidad, un besito para ti. Chaparrón de besos y abrazos segundaciteros
27 de septiembre de 2014, 8:35
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Silvio dijo...
Entrevista a Daniel Viglietti.
Arturo Cruz Bárcenas: "La lucha del 68 ayudó a creer en la idea de la transformación"
27 de septiembre de 2014, 8:40
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Silvio dijo...
Algo bastante peor que el reguetón: La crueldad de los matrimonios infantiles
Más de 140 millones de niñas habrán sido víctimas de este fenómeno entre 2011 y 2020, según estimaciones de la ONU
27 de septiembre de 2014, 8:55
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Patricia Moda dijo...
sí q es terrible lo de los matrimonios infantiles.
27 de septiembre de 2014, 10:29
El Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros dijo...
Los símbolos son grados
En el Congreso recientemente organizado por LABIOFAM, se incluyó la presentación de dos perfumes que, según declaraciones a la prensa internacional de funcionarios de esa empresa, llevarían como marcas los nombres de “Ernesto” y “Hugo”, en un supuesto “homenaje” a los comandantes Ernesto “Che” Guevara y Hugo Chávez Frías.
Los pormenores de esta acción irresponsable fueron analizados a fondo en la noche de ayer, viernes 26 de septiembre, con el director de la empresa y los funcionarios que presentaron el producto, aún en fase de desarrollo, por lo cual no está producido comercialmente ni mucho menos registrado. Quedó esclarecido que no es cierto que los familiares del “Che” y Chávez hubiesen aprobado semejante utilización de sus nombres, como afirmó uno de los funcionarios a la agencia de noticias norteamericana AP.
Por este grave error serán tomadas las medidas disciplinarias que correspondan.
Iniciativas de esta naturaleza no serán aceptadas jamás por nuestro pueblo ni por el Gobierno Revolucionario.
Los símbolos ayer, hoy y siempre, son sagrados.
27 de septiembre de 2014, 10:44
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Silvio dijo...
Esta declaración del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros, publicada hoy en Granma, nos devuelve el alma al cuerpo a unos cuantos.
27 de septiembre de 2014, 10:46
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Norma dijo...
Con Mónica Rivero y con todos los que dieron la batalla con todas sus fuerzas y medios a su alcance contra la absurda y patética decisión de LABIOFAM, que quedó resuelta con la pronta actuación del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros publicada en el Granma. Un triunfo del sentido común y de los valores que debemos preservar.
Contra todo lo que denigre al ser humano, máxime cuando se trata de menores. Contra las direcciones de las escuelas que permiten acciones, músicas y contenidos que no son aptos para los menores que están bajo su custodia durante el horario escolar y contra los padres, que violando los derechos de sus hijos menores, afectan el normal desarrollo de su infancia, exponiéndolos a actitudes y contenidos violentos, obscenos o demasiado sexuales para los que no están ni pueden estar preparados por su edad y que por ello mismo, se consideran, universalmente, contenidos no aptos para menores. Existe consenso en la comunidad científica, a saber psicólogos, sociólogos, pedagogos, etc, sobre lo que es nocivo para la formación y desarrollo integral de los niños, lo que puede alimentar o destruir su inocencia, su fantasía, su creatividad, su percepción del mundo y la creación de sus valores, lo que implica violencia contra ellos. En esa particular y delicada etapa de la vida del ser humano, los responsables de ellos, los padres y los maestros, son los que escogerán por ellos y para ellos, los contenidos y las formas que irán formando su mundo interior y educando su sensibilidad y están en la OBLIGACION MORAL Y LEGAL de escoger con mucho cuidado, con mucho sentido común, estando bien seguros de que lo que escojan sea edificante y contribuya a su desarrollo psicosocial. En ese sentido, no caben las equivocaciones y somos responsables por cualquier daño que les infrinjamos, queriendo o sin querer.
27 de septiembre de 2014, 11:04
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Gabita dijo...
Hola querido Silvio y queridos segundaciteros:
Leo, aprendo, pienso, gracias!!! Me quedé con el tema de los niños y el regaetton... Pensando en aquello de la necesidad de proteger la inocencia como un don de la infancia, y aquella famosa tesis de Postman según la cual los medios masivos de comunicación (especialmente la TV) colaboraban con el fin de la niñez al develar algunos de los secretos mejor guardados del mundo adulto (el sexo, la violencia, la incapacidad de los adultos para gobernar el mundo) me acordé de una de las canciones más dulces y tiernas sobre el amor maternal (paternal también, no me denuncien por discriminación de género!!!) , y que por cierto jamás escuché por TV...
Y leí a Carmina, y pensé que los padres somos responsables por guardar algunos secretos, pero también por mostrar, regalar, ofrecer a nuestros hijos la belleza que es capaz de producir el alma de los adultos, también. O tal vez no haya que ocultar secretos, sino ayudar a ver reflexivamente, amorosamente diría.
Se las dejo, tal vez no tenga nada que ver con nada, pero es hermosa, es sábado, me cansé de limpiar y pasé a saludarlos, porque sí, porque los quiero.
Ah... me gusta mucho leer a patriaesvirtud
PD: Natty, especialmente para vos!!!! Luna Monti y Juan Quintero El Niño
https://www.youtube.com/watch?v=O8aRwZ2lXkc
27 de septiembre de 2014, 15:02
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Gustavo modarelli dijo...
Hoy vi, por primera vez, a niños bailando reguetón. Automáticamente, se me cruzaron muchas cosas por la cabeza.
Lo primero fue lo leído de antropólogos muy reputados respecto de la niñez, en culturas "exóticas". La niñez termina en la adultez. No existe la idea de "adolescencia". Eso es propio de la nuestra, que hace que durante algunos años los niños "adolezcan" de la ambivalencia de ser muy niños para algunas cosas, y muy adultos, para otras.
Malinovsky (creo) describe una de esas comunidades, los tobriandeses (pido perdón si me confundo), en la que los niños cargan con un trabajo que odian los adultos, y es atender a los más pequeños. Deben evitar que lloren. También deben aprender los trabajos adultos, y aquí hay una tensión: si lo hacen demasiado bien, corren el riesgo de que los casen muy pronto, y perder la libertad de la niñez. Pero, si exageran al "hacerse los tontos", podrían hacerse fama de inútiles, y luego no podrían casarse. Al anochecer, cuando acabaron con sus obligaciones, estos jovencitos se pierden en la espesura y, durante horas, se escuchan sus risas y juegos, en libertad. Lo notable de estas comunidades es que, hasta la llegada del europeo, no sabían nada sobre perversiones sexuales. Ni siquiera disponían de un vocablo para designar una "violación", ya que era algo inconcebible para ellos.
Yo creo que hay que acompañar la evolución natural de la sexualidad infantil. Sabemos que los niños juegan a imitar a los adultos. Y, sabemos que esos juegos no terminan como si fuesen "de verdad". Cuando juegan al poli-ladro, y se "tirotean", el juego no termina con la muerte de nadie, simplemente porque el niño no lo desea ni lo necesita. El adulto sólo debe vigilar que "no se pasen de revoluciones", usando un arma que pueda lastimar de verdad. Tampoco un juego de "seducción" tiene que terminar con relaciones sexuales plenas (mientras no hayan llegado a la maduración correspondiente)
27 de septiembre de 2014, 17:53
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Gustavo modarelli dijo...
No creo que sea bueno defender la "inocencia" de los niños. Es peligroso. Si un niño no sabe qué es una relación sexual, es "inocente" ¿Y, qué es el que ya lo sabe? ¿"Culpable ..."? No, claro ... Pero, se convierte en "sospechoso", y habría que poner trabas para que no se mezcle con nuestros hijos ...
Creo que hay que tomar en cuenta a cada niño, y a cada niña, sus intereses, y acompañarlos sin caer en una hipocresía que estropearía nuestro diálogo con ellos.
¿Por qué habrían de creer en la cara de espanto que ponen los adultos cuando los ven jugar de esa manera? ¿Por qué habrían de creer que el juego que juegan es tan "sucio" y "peligroso", que se necesita ser adulto para jugarlo? Y, después nos ven vivir ... Y, resulta que en la tele aparece una señorita que exhibe su extraordinaria cola para promocionar ... un complejo vitamínico. Y, luego, la misma cola podría servir para promocionar un automóvil, un viaje a la Luna, un par de zapatos, o una enciclopedia etrusca ... Y, siempre, la medida del éxito lo da la relación sexual que se consuma con la compra ... O, los premios que reciben los héroes de ficción, de series y películas. Su éxito se corona con las relaciones sexuales más admirables, entre semi-dioses. ¿Entonces, si nosotros vivimos en una sociedad enferma, donde está reprimida la sexualidad natural, llenos de perversiones, y donde se les dice a los niños "No tenés que desear eso ... Bueno .., podés desearlo, pero no mires ... Bueh .., dale una miradita, pero no toques ... Tocá un poquito, pero después retirate ...", cómo esperar que no se confundan? No se confunden solos. Los confundimos nosotros. Y, no creo que sea bueno auto-disculparse por el hecho de que pululen alrededor nuestro los mercachifles que sólo quieren ganar dinero. Eso va a existir mientras exista el capitalismo. Tenemos que analizar bien lo que haremos como padres, teniendo presente siempre que la moralina colonizadora fue la que trajo las peores perversiones, las neurosis, y convirtió a la sexualidad humana en lo que es actualmente, una suciedad peligrosa, que sólo se convierte en una práctica maravillosa y celestial si es exorcizada, previamente, invistiéndola de compromisos, elevados propósitos, y sentimientos incomparables ...
PD: Conste que no me opongo a la profusa exhibición de colas y senos de gran factura, para vender bicicletas, fusiles, o lo que sea... Si hay que sacrificarse mirando ese espectáculo, tengamos valor ... (¡Ja, ja ...! Estoy bromeando)
27 de septiembre de 2014, 17:53
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paloma dijo...
Mi querido amigo querido, leerte me trajo el recuerdo de una tarde de verano, jugábamos con los chicos del barrio a las escondidas, y coincidí en el escondite con Diego...creo que la búsqueda se demoró un poco o nos aburrimos de esperar.. vaya a saber, la cosa que me ligué el primer beso en la boca… pequeñito... apurado… fue tema de conversación durante días y días con mis amigas.. yo tenía 10 años..
La niñez es una maravilla, los despertares una bendición..
Leo entonces tu enlace sobre matrimonios infantiles… y no puedo dejar de pensar también en la trata de niños, en el abuso físico, en el maltrato psicológico, la prostitución obligada…ver cifras, quitan el aliento..
Nuestros niños hoy, viven rodeados de información externa, no podemos taparles los oídos, no podemos cubrirles los ojos…y no podemos inventarles una infancia a nuestro gusto. Acompañarlos siempre y libertad para ellos ¡!
Cata duerme, tibia y tranquila…un día llegará su beso.
Te quiero siempre.
28 de septiembre de 2014, 1:16
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Silvio dijo...
Paloma y Gustavo, curiosamente, Dios nunca se interpuso en mis deseos. Más le valía… Dios, vagamente, según mis abuelas, que eran las creyentes de la familia, tenía que ver con la creación del mundo, con el universo, con lo que había más allá de la muerte... Quizá por eso a los 8 yo era un corrupto consumado (no consumido). Debajo de la escalera de mi escuela esperé a mi amiguita Cary y rocé mi boquita con la suya. No sólo fue mi primer beso, también mi primera bofetada. Así aprendí a dejar a las niñas tomar la iniciativa. Me desquité ampliamente con una chica de los altos, algo mayor que yo, que no se atrevía con los de su tamaño. No me costó trabajo asumir mi papel de objeto de su lascivia adolescente. Jamás me sentí ultrajado sino más bien bendito. Algunas víctimas pueden ser temibles.
28 de septiembre de 2014, 7:55
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kinka piro dijo...
Perreando,
si que hay diferencia, y aun falta un término para completar el asunto conceptual: Sensualidad es una cosa
sexualidad, otra
y genitalidad. otra más.
coincido con el ralo Gustavo en aquella parte de su análisis que puntualiza la relación entre el despertar sexual y la sociedad de consumo.
Hoy las tensiones son diferentes a las de nuestra y su época...
entonces la sociedad moderna y moralista daba al sexo la moralina del pecado.
Hoy la moral del sexo, es la del consumismo. Debes ser un objeto sexi para ser alguien.
antes era el pecado de los cuerpos que se tocan hoy es el cuerpo como objeto de status, que se usa, se vende y se compra.
28 de septiembre de 2014, 8:41
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patricia.c dijo...
Yo creo que la inocencia de los niños no está en saber -o no- en qué consiste una relación sexual (de hecho creo que los niños se las arreglan bastante rápido para enterarse). Está, en el desconocimiento de todas las perversiones que son patrimonio de la humanidad adulta. Esto les permite imaginar, jugar y confiar sin las barreras y los frenos que luego va imponiendo la experiencia y el conocimiento.
La llama doble de Octavio Paz que define muy bien los conceptos de sexo, erotismo y amor. Sexualidad es todo lo que nos define como hembra o varón. Sensualidad es todo lo que captamos por los sentidos y el goce que se desprende de ello.
28 de septiembre de 2014, 8:54
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Yamirys dijo...
AYYYYYY CONEJA me sacaste la RISA de un TIRON ,ajajajajajajajajajajajaja.
Y tú sabes bailar eso??? Yo me quedé en la SANDUNGUERA.. la perrera no se me pega, no se me pega..,ajajajjajajajaja que barbaridad no me modernizo ,ajajajajjajajaja Por lo que veo esa GUAJIRA está mas adelantá que el Carijo…( yo voy a ver cuándo la NICA y ella se pusieron a practicar??????).ajajjajajaja Y metidita en el MONTE!!!!! , mosquita muerta ajajajajajajajaja
Ya ahora si hiciste que fuera feliz para mi casa, BUEN FIN DE SEMANA A TODOS!!!!!
LOS ADORO!!!!! GUAJIRA, ven el SABADO si quieres bailar reguetón….porque ya para LUNES, AQUÍ NO QUEDA NADA ,ajajajajajajajjaja
29 de septiembre de 2014, 7:33
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Educando (ex perreando) dijo...
"...tratando de valer tanto como quien más valga, que es cosa que en la mayor pobreza se puede obtener, con la receta que yo tengo para todo, que es saber más que los demás, vivir humildemente, y tener la compasión y la paciencia que los demás no tienen.-A mí vuelta sabré si me has querido, por la música útil y fina que hayas aprendido para entonces: música que exprese y sienta, no hueca y aparatosa: música en que se vea un pueblo, o todo un hombre, y hombre nuevo y superior. Para la gente común, su poco de música común, porque es un pecado en este mundo tener la cabeza un poco más alta que la de los demás, y hay que hablar la lengua de todos, aunque sea ruin, para que no hagan pagar demasiado cara la superioridad.-Pero para uno, en su interior, en la libertad de su casa, lo puro y lo alto.-..."
José Martí (Carta a María Mantilla - su hija)
29 de septiembre de 2014, 12:07
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