El problema va más allá del reggaeton o de tantas músicas estupidizantes, que no son más que elementos de una cultura consumista descerebradora y descerebrada que incluyen cine de fórmula 1, telenovelas jaboneras, seriales de mucho ruido y pocas nueces, en fin arte apócrifo globalizado que contamina el medioambiente espiritual del planeta a niveles tales que amenaza con extinguir en vida la raza humana. Fíjate en la gente que vaga a tu alrededor (escapa de la ceguera yoista que padecemos —gracias a la epidemia "american way"—) rompe la visión instrospectiva, haz un esfuerzo y échale un vistazo a lo que pasa por tu lado con categoría aun de persona.
Verás no pocas miradas vidriosas, como de peces, inexpresivas; la seudocultura despoetizante, surte tales efectos que muchos que van por la calle son solo máquinas ambulantes que responden únicamente a reflejos condicionados elementales, ya casi no coordinan ideas, balbucean apenas, se rien sin sentido, o braman idem. El Paleolítico Inferior se acerca nuevamente. El hombre (y la mujer —que no vamos a discriminar tampoco en esto) de las cavernas no son el pasado sino el futuro, y muchas "obras" del reggaeton (como otros tantos componentes de lo que —con toda intención— llaman Arte, los impostores) son prueba irrefutable. No creo que todo el reggaeton sea malo, lo que pasa es que el contiene una idea sensata —digamos que de ciertos rasgos humanoides—, es la aguja en el pajar —y no la he encontrado.Seguiré buscando.
Escribo motivado por este formulario que
me enviaron por correo; alguien lo recibió de la página web de Ulises Toirac.
Hay un sonsito, medio changüiciado en el disco La voz del Diablo Ilustrado, cantado por Fernando Bécquer "Son a la moda" que, como tiene que ver, lo paso:
Verás no pocas miradas vidriosas, como de peces, inexpresivas; la seudocultura despoetizante, surte tales efectos que muchos que van por la calle son solo máquinas ambulantes que responden únicamente a reflejos condicionados elementales, ya casi no coordinan ideas, balbucean apenas, se rien sin sentido, o braman idem. El Paleolítico Inferior se acerca nuevamente. El hombre (y la mujer —que no vamos a discriminar tampoco en esto) de las cavernas no son el pasado sino el futuro, y muchas "obras" del reggaeton (como otros tantos componentes de lo que —con toda intención— llaman Arte, los impostores) son prueba irrefutable. No creo que todo el reggaeton sea malo, lo que pasa es que el contiene una idea sensata —digamos que de ciertos rasgos humanoides—, es la aguja en el pajar —y no la he encontrado.Seguiré buscando.
Escribo motivado por este formulario que
Hay un sonsito, medio changüiciado en el disco La voz del Diablo Ilustrado, cantado por Fernando Bécquer "Son a la moda" que, como tiene que ver, lo paso:
Son a la moda
Mamá, yo quiero saber:
¿en dónde están los cantantes de esa trova fascinante
que hoy apenas puedo ver?
El mundo parece ser una feria de sonidos
que adormecen los sentidos con aroma de Babel.
El mundo pretende ser un programa de latidos
coronando lo manido del que renuncia a su piel:
La música es un batido de acrobacia con Buñuel
(perdón, Buñuel).
Brinca que te brinca como un chivo que tu música es batido.
Deja la cabeza en casa que este baile no la usa
menea la calabaza se acabó la salsa rusa (Coca cola).
Brinca que te brinca como un chivo que tu música es batido
Olvida tu corazón y las caricias sensuales
inérciate en reggaeton que el machismo se te sale (¡la galleta!)
Brinca que te brinca como un chivo que tu música es batido.
Si un disparate alevoso se te ocurre tararear
serás un autor famoso de cultura marginal (¡oye, Chaplin!).
Oyeeé... Oyeeé… ¿quién me compra un cake?
Esto aquí no viene al caso pero rima y ya veréis
que en un par de semanitas estoy en el hit parade.
Mamá, ay mamá no voy a caer en el bache de la moda
que el fin de sueños no joda:
Siempre que hay amor hay trova
y por oscura la noche no deja de amanecer.
Diablo, la noche no es tan obscura
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